Sociedad

Trascendencia troceada a los 482 años de Bogotá

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Valdría la pena preguntar en pleno contexto pandémico y con ocasión de la celebración del cumpleaños número 482 de Bogotá, ¿cuánto hemos podido extirpar de nuestra experiencia de la vida aquellos rasgos religiosos por los que el ente humano procuraba trascender su propio tiempo y vindicar fuertemente su existencia devolviéndole a su vida la potencia de un ser que le aseguraba un modo pleno de existir?

Existen cientos de signos que podrían relatar la vida fragmentada de esta experiencia, del pensamiento mítico que la informa y de las creencias religiosas y trascendentes en la actual coyuntura pandémica provocada por la irrupción del SarsCov2 en esta particular formación histórica nuestra. En un contexto pandémico dominado por las formas en que se presenta la reflexión epidemiológica y en el que pareciera que los Estados han mostrado la mano dura por tanto tiempo aclamada por los anti neoliberales, se nos aparece nuevamente la cruda realidad de la muerte por algún tiempo perdida de vista por las veleidades y simulacros del consumo y con ella un modo de vivir la trascendencia por trozos.

Acudir a la interpretación de esta experiencia a partir de la metáfora por trozos implica que está en puertas partes, a diferentes escalas y muchos dominios la proscriben. Esto no es nada nuevo. “Podría” decirse que desde la política y la ciencia la trascendencia es llamada a reactualizarse y no sin ayuda del componente religioso con el que posiblemente vino al mundo. Las prescripciones políticas de la administración local se mezclan con el discurso médico y epidemiológico global para decirnos que pueden salvarnos de morir por COVID-19: nos advierten y previenen de faltar a su saber y a sus disposiciones con las consecuencias negativas que puede conllevar infringirlos. En suma nos prometen por ahora no morir si aguardábamos bajo su amparo y su poder.

Valgámonos de esta metáfora para penetrar en lo dicho y lo acaecido en la celebración del cumpleaños #482 de Bogotá. Desde allí la que la primera mandataria de la ciudad se hizo rodear de representantes de diversas formas y movimientos religiosos para enviar un mensaje a la ciudad que una intervención posterior hizo más claro el significado de esta compañía en un acto de celebración público:

“No poder hacer una celebración religiosa que tal vez nos hubiera dado consuelo…Por eso empezamos la conmemoración de los 482 años de nuestra ciudad esta mañana en nuestro parque metropolitano Simón Bolivar, en una conmemoración interreligiosa donde todas las formas de fe, de creencia de nuestra ciudad, se unieron en un momento para acompañar a las familias que han tenido un duelo, que han tenido una situación difícil, a que este momento nos recordaramos que todos somos uno, que todos estamos juntos, que de este desafío… vamos a salir fortalecidos con nuevos hábitos de vida, con nuevas costumbres, para enfrentar nuestro cuidado pero también nuestra reactivación”.

Desde este breve fragmento discursivo puede entreverse el modo como troceadamente se presenta la trascendencia. La presencia de ministros religiosos y la recitación de extractos de sus libros sagrados acompañan las palabras de López. Es posible ver en contexto de su intervención la dimensión política de este trozo.

La alocución de López resalta la función social de cohesión que se atribuye a la religión en la teoría sociológica clásica. Por otro lado asume la intervención de lo religioso en un dominio existencial que el Estado apenas alcanza, el consuelo. Y como haciéndole eco al pensamiento mítico ahora dirigido a la diosa ciencia, asegura un futuro promisorio en el que los sujetos ciudadanos estaremos renovados. En suma podría pensarse que la función social que se le otorga en este discurso a las creencias religiosas está dada por el hecho de que el Estado no puede consolar ante el duelo, y que además, siguiendo a Habermas en la Dialéctica de la Secularización, no se sustenta sobre sus propios fundamentos normativos. Podría verse allí una razón de por qué López llama a la unidad y a la unión desde un ámbito de existencia donde la política daría muestras de ser enteca.

Es lícito exponer que la experiencia de la trascendencia no se desasocia de su estructura partera: las religiones. No es menos cierto que no sólo sobre éstas descansa hoy día: esta trascendencia no ancla en la reactivación completa de una vida religiosa que la pandemia retorna a la vida. Pero tampoco se trata de una aparición reformada de las creencias religiosas, sino de la manera como se contextualizan: no quisiéramos apresurarnos a decir que decir que las múltiples referencias de la experiencia de la trascendencia la han hecho menos potente.

A diferencia de lo que sucede con las religiones, el trozo de trascendencia que es definido desde la política local promete que nos salvará de la muerte por COVID-19 si no perdemos de vista sus directrices: no nos promete la vida ante cualquier muerte, ante las posibilidades de su inminencia. He aquí la segunda característica que quisiéramos hacer surgir de la metáfora de los trozos, del trozo que alumbra opacamente desde la política. Este rasgo metafórico despliega una figura particular: una trascendencia manca y estrecha de miras en la que como la misma mandataria dice, estaremos renovados tras la pandemia. Es de la muerte por la pandemia y no de la muerte de la que espera trascendernos tras encontrar la solución científica de la vacuna o del tratamiento médico. Podría verse allí una razón de por qué la mandataria se hizo rodear de representantes religiosos para celebrar de representantes religiosos: no solo para procurar consuelo sino para asegurar mejor la trascendencia que en la política basada en el conocimiento solo descansa por trozos.



Sobre el autor

Esteban Trujillo

Escritor

Navegando el océano de las palabras disfruto tomándolas a mano para ondear el sentido de la política, la religión, la filosofía y la transformación cultural. Maestrante en estudios culturales y con mucha pasión por las letras.



El contenido de este artículo es propiedad de la Revista Cara & Sello



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